Son pequeños colgantes huecos generalmente en forma de bola con una pieza en su interior que al agitarlos producen un sonido muy agradable tipo cascabel. Según la tradición el llamador de ángeles es el encargado de llamar a nuestro angel de la guarda para que nos ayude y proteja.
Este tipo de colgantes se suelen llevar largos a la altura del chakra del corazón o la tripa y sobre todo son muy aconsejables para mujeres embarazadas ya que los llamadores con su sonido ofrecen bienestar y protección al bebé. También se utilizan en feng shui para limpiar el ambiente y renovar todas las energías.